El día de ayer fui a ver TS3 (al fin) como tiene que verse, en 3d y digo que tiene que verse de esta manera ya que al recibir tan buenas críticas y algunos considerarla como una de las mejores cintas de todos los tiempos, los mejor era verla lo mas espectacular posible y decidí hacerlo de esta manera, al llegar a taquilla pague $150 pesos por 2 boletos (ouch) y recibí los susodichos lentes 3d, entramos a las sala, me coloque cómodamente para ver la cinta y al abrir los lentes... estos estaban sucios como de salsa de palomitas o algo así, la película ya estaba empezando y yo con los chingados lentes sucios!!... me lleva!!, rápidamente me lanzé a taquilla a cambiarlos por otros, al regresar y ya cerca de la sala los abrí para verificarlos y nuevamente me habían entregado otro par de lentes sucios (no chingen) regrese por segunda vez a taquilla a que me los cambiaran, abrí los terceros ahí mismo y sucedió exactamente lo mismo, ¿¿que mis $150 pesos no le alcanzan al puto cienepolis para darme un par de lentes nuevos o desinfectados o al menos limpios??... me dieron los cuartos y lentes.... y lo mismo.. mierda al tetaedro pensé -mientras TS3 se proyectaba alegremente- la quinta es la vencida y ya encabronado le dije a la de la caja "que es una broma? o que?, no tienes unos nuevos? el boleto no es nada barato para que me salgan con esto", " inmediatamente me dieron un quinto par pero esta vez casi nuevos... digo no es que sea exagerado pero creo que el costo del boleto alcanza a que nos den un par de lentes nuevos y evitarnos este tipo de situaciones y algunas posibles infecciones por salsa rancia de palomitas, en fin regresé a la sala y TS3 me hizo olvidar por un instante no solo esto, sino todo lo que ocurre a nuestro alrededor, en resumen es una de esas películas que te hacen recordar lo grandioso que puede ser el cine... gracias PIXAR.
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